¿Cómo las imágenes, formas e ideas de ida y vuelta dan vida y color a NextGenC?
NextGenC es un proyecto que busca conceptualizar, medir y analizar críticamente la participación juvenil y el papel mediador de la tecnología digital y la informatización en la gobernanza de las ciudades intermedias de Colombia. Formalmente, esa es la dirección sobre la cual hemos venido trabajando para investigar, avanzar y transformar la participación juvenil y la gobernanza urbana en Colombia. Pero, ¿cómo lograr una identidad visual palpable y de recordación con los elementos necesarios para trascender una pantalla, un conjunto de palabras, unos resultados académicos?
Piensen unos segundos en una situación así: ustedes quieren emprender una iniciativa o, ¿por qué no?, crear su propia imagen personal para proyectar a los demás. Que su nombre, logo o «batiseñal» al ser visto por cualquiera remita inmediatamente a lo que usted está emprendiendo, proponiendo, comunicando. ¿Qué haría primero? Tómese algunos segundos para imaginarlo. ¿Qué colores usaría? ¿Su logo tendría alas de murciélago? ¿Letra Times New Roman, Arial 12, Verdana?
Ahora imagine que no solo usted toma esa decisión, tal como ha sucedido, por ejemplo, con el escudo y los colores de la bandera de la ciudad o país desde el cual nos está siguiendo y leyendo. En el caso de NextGenC, hay siete organizaciones, algunas de ellas fuera de Colombia, con una identidad gráfica e integrantes que tienen ideas, gustos, colores, imágenes y trayectorias de vida distintas que hasta el día de hoy siguen dejando su granito de arena para que este proyecto impacte a más personas.
Es un camino lleno de preguntas, ideas a veces contradictorias y retroalimentaciones, muchas retroalimentaciones, pero tal como Roma, no se construyó en un día. En procesos así, lo primero siempre es pensar a quién va dirigido el proyecto, público objetivo en términos publicitarios-marketineros. Eso es un reto mayúsculo: cómo canalizar una imagen familiar, profesional, atractiva, visualmente agradable y armónica en la que, al verla, las personas se sientan identificadas. En nuestro caso, si bien trabajamos principalmente con jóvenes de ciudades intermedias, queríamos ir más allá, abarcar también a personas de varias regiones, rangos etarios y hasta gustos.
Gracias a Hay Día, la agencia que ha acompañado todo el proceso de página web e identidad gráfica, ustedes logran disfrutar de lo que esta página y proyecto tienen para ustedes. Teniendo el público definido y la definición del nombre —proceso ya contado por nosotras en el artículo anterior—, cada elemento de la página web, color, tipografía y componente de la página web es resultado de sesiones de co-creación con varios integrantes del equipo del proyecto a partir de lluvias de ideas, ejercicios de asociación entre imágenes y palabras clave —como un collage— (gobernanza, juventud, urbanismo, tecnología digital, participación). Estos ejercicios fueron consolidando lo que es hoy la identidad gráfica de NextGenC, es decir, el logo, la paleta de colores, tipografía, iconografía y aplicaciones de marca.
Para el logo, nuestra batiseñal en una hipotética Ciudad Gótica, buscamos una imagen que reflejara conocimiento, familiaridad, originalidad, cómoda de ver, pero también de identificar. En este caso, un rompecabezas con el nombre del proyecto que se une da a entender una apertura a la participación de muchas personas en distintas zonas del país y, a la vez, que se puede llegar a un punto común. Fueron reuniones con distintos bosquejos con varios tipos de colores y fondos dentro de cuadrículas que fueron socializándose y votándose con los socios del proyecto hasta llegar a ese punto que inmediatamente pueden observar en la esquina superior izquierda de sus pantallas.
Para la paleta de colores que pueden ver, se llegó también a través de una serie de votaciones hechas por los integrantes del proyecto. Por supuesto que hay miles de combinaciones posibles, pero quisimos iniciar con tonos llamativos, degradados que reflejen modernidad, empatía, participación e independencia. En cuanto a la tipografía, parte difícil por la variedad de tipos de letra, se fueron ajustando con base en criterios en los cuales la letra no alterara sino exaltara y captara una atención de lo que el proyecto tiene para decir. El blanco siempre es una buena opción, pero no la única. Los colores y la letra deben ser tan o más complementarios que Batman y Robin, pero para eso se necesita tiempo.
Por último, la iconografía es una serie de elementos en los cuales, a partir de las sesiones de trabajo, se buscó dar un significado, una señal, de palabras clave dentro de lo que es el proyecto. ¿Recuerdan ese ejercicio de asociación de imágenes con palabras clave? Este es precisamente uno de los resultados de este.
Resumimos cómo dar unas imágenes, unos colores y asociaciones de lo que es NextGenC para nosotras. Este espacio está abierto a que sigan el proyecto y nos escriban, esperando también que este proceso incentive a crear su propia imagen personal o identidad gráfica, esa que los pueda distinguir de los demás, pero también refleje lo que quieren mostrar y expresar.